12 may 2016

Poquito más

Hoy me sentí deprimida.

A lo que yo le llamo depresión estoy segura de que es lo que por ahí psicoanalistas describen. He leído, visto vídeos para detectar y tratar la depresión.
Lo único que puedo decir de todo esto es que he aprendido a entender y justificar mi estado; y entender lo que me pasa. Admitir frente a personas que amo que mi mundo de vez en cuando es gris me ayudó. Ayuda a no juzgarme, a quererme así, pero no ayuda si solo me quedo en eso.

Tuve tiempo de pensar en esta percepción (y acá es cuando me creo medio lunática) y puedo ver el proceso de lo que me pasa.
Puedo "pasar en limpio" cada una de las experiencias donde empiezo a demostrar mi estado depresivo, no tengo un porqué, no encuentro una relación lógica de que me pasa y porque todo es tan oscuro y triste. Lo mejor es dormir, o desaparecer, o incluso ... lo importante es que un pensamiento muy grande de "y si ya no estas, no jodes, listo" sumado a un montón de maneras horribles de ver las cosas, de llorar, porque si, porque es una angustia muy grande, es lo único que tengo.

Me preocupa la idea de que es cíclico, de que me pasa siempre. No puedo simplemente estar un tiempo indefinido  sin volver a caer.
Pero hoy me pasó algo increíble, algo que quiero dejar acá escrito:

Estaba ahí como siempre, viendo el día lo más gris que podía y lloré. Mi primer pensamiento (poco alentador, claro) fue que debería marcar el día que me pasa, los días si fuera necesario.
Así llevaría la cuenta de que tan cíclico es y bla bla bla. Pero a su vez me centré en otra cosa, ¿por qué estaba mal? me lo pregunte y mi respuesta fue "no sé" y se me dio por pensar (esto mientras ya había marcado el día en el calendario del teléfono) que del otro lado del cuarto alguien estaba cocinando, para mi, para que comiera, las dos. Y que estaba ahí (insisto) en ese momento, cocinando para mi, para que comiera, las dos.                        
No necesite mas, me levante, me limpie las lagrimas y fui a ver si precisaba algo. Todo mi día cambió.

No se si fue ella en si, porque la verdad ella pudo haber sido cualquier otra persona antes, pero jamas, nunca... tuve ganas de levantarme cuando ya había empezado a llorar, y lo hice. Y hoy soy un poco más dueña de mi.